El obispo de Puerto Plata, monseñor César Corniel Amaro, afirmó que el discurso que el presidente Danilo Medina dirigió a la nación es “esperanzador para traer paz y tranquilidad a la familia dominicana y un cambio en el escenario político nacional”.
El prelado dijo que ahora “hay un espacio para cada una de las fuerzas políticas, que ya saben cómo manejarse hacia lo interno” de sus organizaciones.
“Había un ambiente de confrontación que estaba causando intranquilidad en la familia dominicana; valoramos grandemente la posición del Presidente y esperamos que todo se enfoque a la preparación de las nuevas elecciones del próximo año”, agregó.
Acerca de la evaluación de la gestión de gobierno de Medina, monseñor Corniel Amaro indicó que “cuando vamos al aspecto social, ha habido una gran identificación con muchas problemáticas sociales, de respuesta a muchos sectores que antes no estaban siendo atendidos debidamente”.
A seguidas añadió: “hemos visto una identificación, una presencia y un acompañamiento de respuesta de Danilo Medina ante esas problemáticas.
Sin embargo, señaló que “no siempre un gobierno va a lograr satisfacer todas las demandas en la solución de sus problemas. Hemos avanzado”.
En cuanto a una posible rehabilitación de Medina para la actividad política-electoral, el prelado dijo que “el hecho de no ejercer una posición política determinada no significa que la persona tiene que aislarse, que arrinconarse”.
Asimismo, expresó que “la experiencia que Medina ha tenido en el poder es una fuerza que debe ser aprovechada por el país en todos los aspectos que pueda contribuir, colaborar en programas que no debían terminar, sino fortalecerse y que sean una respuesta a la problemática que viven nuestros sectores”.
Separación de las elecciones
En cuanto al pedido de alcaldes y munícipes para que se celebren en un mismo año las elecciones congresuales y municipales de la presidenciales, monseñor Corniel Amaro dijo que necesariamente esa idea no debe ser vista como “señal de atraso sino de crecimiento, si se ve que es favorable”, pero recordó que antes se había decidido que era conveniente separarlas.
“Creo que la población dominicana no puede cargar con tanto tiempo dedicado al debate de temas enteramente políticos, deben manejarse sin dejar a un lado la problemática del país, que debe ser el enfoque en la solución de los mismos”, afirmó el prelado católico.
