LA ROMANA.-El Ministerio Público de este departamento judicial logró que fuera dictada la pena máxima de 30 años de prisión en contra de cada uno de tres hombres que fueron hallados culpables de incurrir en distintos hechos en los delitos de homicidio, tentativa de homicidio y abuso sexual.
Las sentencias fueron dictadas por el Tribunal Colegiado en contra de Francisco Javier Guaba Ávila (Coquito) y Edwin Jordany Figueroa (Toñito) por el homicidio de Keury Omar Coss Quezada, así como de un hombre que fue hallado culpable de los delitos de tentativa de homicidio y abuso sexual en perjuicio de la hija de una vecina de 9 años de edad, cuyo nombre se omite para proteger la identidad de la víctima.
El tribunal dictó las sentencias condenatorias por la violación de varios artículos del Código Penal Dominicano y del Código para la Protección y los Derechos Fundamentales de los Niños, Niñas y Adolescentes, ordenando el cumplimiento de las condenas en el Centro de Corrección y Rehabilitación Cucama de La Romana.
En torno al proceso judicial que se llevó a cabo en contra de Francisco Javier Guaba Ávila y Edwin Jordany Figueroa, indicó que le ocasionaron la muerte a Keury Omar Coss Quezada en fecha 14 de mayo de 2017, mientras este se encontraba en un puesto de empanadas de esta provincia de La Romana. El expediente indica que la víctima recibió una herida de arma de fuego en el glúteo izquierdo y le salió por el abdomen, lo cual le provocó la muerte casi de manera instantánea.
Mientras que con relación al acusado de abuso sexual y tentativa de asesinato, el Ministerio Público hizo constar en el expediente acusatorio que el encartado abusó sexualmente de la menor en fecha 17 de noviembre de 2017 y que posteriormente le propinó múltiples estocadas de arma blanca en diferentes pates del cuerpo, en momentos en que la víctima se encontraba sola en su residencia.
La Procuraduría Fiscal de La Romana, que dirige la magistrada Reina Yaniris Rodríguez, demostró estos graves hechos con pruebas fehacientes y suficientes, logrando que los encartados fueran condenados de manera ejemplar a la pena máxima luego que el tribunal acogiera de manera completa su petición.
