Telefónica Brasil, subsidiaria del conglomerado español en el mayor mercado suramericano, obtuvo en el primer trimestre del año un beneficio neto de 1.153 millones de reales (unos 204,6 millones de dólares), lo que representa un 14,1 % menos frente al mismo período de 2019, informó este miércoles la compañía.
Telefónica, que opera en el país a través de la marca Vivo, comunicó al mercado que «el escenario de retracción económica, resultado de las iniciativas necesarias de aislamiento social para contener el avance de la pandemia del COVID-19, impactó parcialmente la evolución de los resultados financieros».
Ello debido a que la pandemia del coronavirus se reportó en Brasil a finales de febrero y las medidas drásticas de restricciones y cuarentenas se tomaron casi un mes después, ya finalizando el período trimestral.
De acuerdo con Telefónica Brasil, la caída del beneficio en el primer trimestre se debió principalmente al mayor coste de los impuestos y al aumento de los gastos con la depreciación del real.
No obstante, Telefónica Brasil destacó el crecimiento entre enero y marzo de varios de sus segmentos, como el de internet de banda ancha por fibra, televisión por suscripción y telefonía móvil pospago, que mantienen a la compañía como líder en el mercado brasileño con una participación del 33%.
Así, el beneficio bruto de explotación ebitda -ganancias contabilizadas antes del pago de intereses, impuestos, depreciación y amortización- de la empresa entre enero y marzo fue de 4.507 millones de reales (unos 799,9 millones de dólares), con un aumento del 3,4 % frente a las cifras del primer trimestre de 2019.
Los ingresos netos de Telefónica Brasil, por su parte, alcanzaron en el período enero-marzo los 10.825 millones de reales (unos 1.921 millones de dólares), equivalentes a un 1,4% menos frente a los obtenidos en los tres primeros meses del año pasado.
