Los fenecidos fueron identificados como Fernando Peña Bonilla, de 42 años, Enrique Reyes Padilla, de 47 y Antonio Olivares Rojas, de 64.
Rojas y Reyes Padilla consumieron un el acohol adulterado conocido como Don Pablo.
La fiscalía de San Francisco de Macorís dijo que junto a investigadores policiales indagan la situación.
Las requisas se han realizado en establecimientos comerciales de Santiago, Esperanza, Mao, Montecristi, Dajabón, Santiago Rodríguez, San Francisco de Macorís, Espaillat y otras.
El miércoles agentes policiales, representantes del Ministerio Público, personal de Salud Pública, Pro Consumidor y el Cuerpo Especializado de Control de Combustibles, desmantelaron en el sector Santa Ana, de San Francisco de Macorís, una fábrica clandestina que se dedicaba a elaborar el ron conocido como don Pablo.
Hicieron un llamado a los comerciantes para que se abstengan de vender ron adulterado y a la ciudadanía que no lo compre. Sin embargo, las autoridades no informaron si hay personas detenidas, pero que encontraron botellas, cajas y otros elementos que eran usados en la fabricación y distribución del ron alterado