El legislador perremeista entiende que, en lo que aparenta un acuerdo secreto de recaudación de fondos entre la Policía Nacional y la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digessett), está ocasionando muchos inconvenientes a motoristas a los que los agentes policiales detienen por faltas que no ameritan la incautación de la unidad motorizada y mucho menos subirlas a los camiones recolectores ocasionándoles daños que no son resarcidos por la entidad ejecutante.
El dirigente político explicó que la inmensa mayoría de los motores incautados son de empleados privados o trabajadores independientes que brindan diferentes tipos de servicios a la ciudadanía, quienes se ven despojados de su herramienta principal de trabajo por los agentes del orden que no tienen ningún tipo de reparo con tal de acumular multas e incautaciones para fines de gratificaciones internas.
Carlos De Jesús reiteró su solicitud al director general de la Policía Nacional, Eduardo Alberto Then, de elaborar un protocolo que aporte a la seguridad ciudadana sin atentar contra los activos de esta, un protocolo claro de actuación policial que permita que sus agentes ejerzan su rol sin incurrir en el reprochable atropello contra los motociclistas.