SAN SALVADOR.- Esperanzado en que responda su reforzado pitcheo para alcanzar una medalla, el softbol femenino de República Dominicana comienza su andar en los XXIV Juegos Centroamericanos y del Caribe de San Salvador 2023, este domingo 2 de junio, con partido ante Venezuela desde la 4:00 de la tarde (6:00 hora dominicana) en el estadio Pablo Arnoldo Guzmán de aquí.
Se miden a los locales de El Salvador el lunes y contra Puerto Rico el martes, son los otros rivales de grupo de Dominicana en la ronda clasificatoria, en la que tiene como reto dos victorias para acceder a los puestos de medallas.
Las expectativas de conquistas de las criollas se amparan en los aportes que puedan hacer, en el renglón de lanzamientos, dos nuevas integrantes de la selección, que fueron formadas en Estados Unidos.
Se trata de Juliana Hooker y Ana Richiez, que se unen a la Monte Plata Cauris Rincón y a Melody Vizcaíno, con formación estadounidense, que ya tiene experiencia con el selectivo quisqueyano.
El torneo femenino de San Salvador se antoja sin concesiones, muy duro, a juzgar por las más recientes competiciones, puesto que México y Puerto Rico han apelado a lanzadoras y jugadoras que se desarrollan en Estados Unidos y han roto la hegemonía que por más de una década implantó Venezuela; más una Cuba siempre competitiva.
Colombia también ha subido su nivel y se incluye Curazao, Guatemala y el anfitrión El Salvador.
Pero las dirigidas por Francis Germán (Jordan) buscan hacer olvidar la actuación de cinco años atrás, en Barranquilla 2018, cuando ocuparon un oscuro sexto lugar, precisamente por su debilidad en el pitcheo, que es lo que espera resarcir con Juliana Hooker y Ana Richiez, Rincón y Vizcaíno.
En el aspecto ofensivo-defensivo se confía en la fortaleza de la veterana receptora Geraldine Feliz y su compañera Alondra Vásquez.
