Input your search keywords and press Enter.

La UE deberá desarrollar un acuerdo que descarta cuotas y plantea incógnitas

BRUSELAS. Tras el acuerdo migratorio de la cumbre de la Unión Europea, los Estados miembros tendrán que dar contenido a un pacto que supone el fin del reparto de cuotas de refugiados pero que deja en el aire algunas incógnitas, entre ellas sobre los lugares de desembarco de inmigrantes.

La UE cerró el viernes un inconcreto acuerdo que aplaza, de momento sin fecha, las reformas más profundas del sistema de asilo, incluida la posibilidad de repartir cuotas de refugiados entre países en caso de una crisis migratoria.

En víspera del comienzo oficial de la presidencia austríaca del Consejo Europeo, el canciller federal, el conservador Sebastian Kurz, se presentó hoy como un “mediador” para “reducir las tensiones” en la UE.

En una rueda de prensa junto al presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, y al primer ministro búlgaro, Boiko Borisov, en la estación alpina de Planai, en el sur de Austria, Kurz destacó la importancia de asegurar que la UE sea fuerte.

Kurz, cuyo gobierno defiende una de las líneas más duras contra la inmigración dentro de la UE, reiteró que valora el cambio de tendencia en materia migratoria, del reparto de solicitantes de asilo a la protección de las fronteras exteriores.

Aliviados por poder presentar un acuerdo sobre el asunto que más divisiones ha creado entre los Veintiocho en lo últimos tiempos, los líderes europeos incidieron ayer en el éxito de haber cerrado un pacto que todos, desde los países receptores de los flujos migratorios a los que no quieren oír hablar de la acogida de refugiados, pudieron suscribir.